sábado

... miedica!

Y aquel personaje tenía miedo de no conseguir lo que deseaba.
Tanto, tanto miedo... que se paralizaba

Y aquel personaje tenía miedo de no alcanzar sus metas.
Tanto, tanto miedo... que se paralizaba.

Y aquel personaje tenía miedo de no saber actuar cómo debía.
Tanto, tanto miedo... que se paralizaba.

Al final... aquel personaje tenia tanto miedo que... se paralizaba, si. Pero como en todas las historias, siempre hay un guionista que va contando la historia, y al final, a pesar de que aquel personaje permaneció inmóvil, el guionista se lo dio todo.

¿Sabéis al final qué pasó?

Que aquel personaje lo consiguió todo, pero entonces, tuvo miedo de perderlo.

Cualquier tiempo presente

Te tengo olvidada, casi caída en el fondo de los peores recuerdos, pero aún así sé que en este momento no es que “No sea tiempo para soñadores” sino que, ahora... tal vez, sea tiempo de resistir a tormenta y aguantar el chaparrón en el mejor cobijo posible. Te tengo olvidada de una forma tan particular, que estás día a día en mi.

Tal vez el tiempo... siempre el TIEMPO.

Que curioso resulta que siempre busquemos en quien depositar responsabilidades, o en quien dejar las decisiones más importantes. Y aquí seguimos, un montón de años en la espalda, un montón de capítulos que han ido dando forma a lo que ahora soy, y todavía sigo dejando muchas cosas en manos de ese “tiempo” que todo lo cura, que todo lo coloca y que nos dispondrá en una situación mejor ... siempre en algo mejor. Siempre esperando algo mejor.

Dicen algo así como que el ser humano es inconformista por naturaleza, siempre buscamos más, siempre intentando mejorar aquello que vivimos (y en muchos casos no nos damos cuenta de que realmente lo que tenemos es bueno de por si)... siempre buscamos que algún aspecto brille más, que algún matiz sea mas alto o que simplemente incluso las piezas mas irregulares encajen dentro de un conjunto que vamos elaborando al mismo tiempo que ese “tiempo” pasa.

Yo, ahora... necesito ese tiempo.
Claro... siempre lo he necesitado.

Necesito que pase un tiempo para amoldarme a esta nueva situación. Necesito que pase un tiempo para poder disfrutar de la gente que realmente me hace sentir feliz. Necesito que pase un tiempo para conseguir sobrepasar barreras que me atan a este lugar, a esta situación, y a este contexto que me sabe a añejo y a pasado. Necesito tiempo para saberme capaz, para saberme valiente, y sobretodo para dar ese paso que llevo tanto tiempo esperando.

Tal vez nos empeñamos en pensar que cualquier tiempo futuro será mejor, dejamos pasar el tiempo porque sabemos que ahora ... no se puede... pero ¿Qué ocurre con el tiempo presente? ¿Qué pasa con este tiempo que se nos escapa entre los dedos? ¿Qué pasa con el “ahora”?... realmente... no puede ser tan malo. Solo hay que lavarse los ojos y aprender a mirarlo.

En tiempos pasados aprendí, en tiempos pasados olvidé malos sentimientos, en tiempos pasados pasé barreras, salté obstáculos y aprendí a poner las tiritas donde realmente hacían falta.

En tiempos pasados aprendí a quererme de otra forma, y tal vez también aprendí a dosificar mis atenciones, mis cuidados y mis pensamientos, en quien realmente podría necesitarlo más... (si, vale, egoísta yo... casi siempre esos cuidados, pensamientos y atenciones me los daba a mi misma... y realmente... siento parecer egoísta, pero en todas aquellas situaciones, yo los necesitaba como el agua en el desierto, y no podría obtenerlos de ningún sitio si no me los daba yo misma)

... que gran invento este del onanismo... (sois tan mal pensados q debía ponerlo... por si acaso!)

Lávate los ojos conmigo! Aprende a mirar de otra forma conmigo! Tal vez, pensando que alguien más lo hará, seré capaz de hacerlo con una motivación extra...

Porque NO necesito tiempo para saber que soy afortunada, sin importar el tamaño de mi fortuna. Porque NO necesito tiempo para saber que alguien me quiere, sin importar la dimensión de ese amor. Porque no necesito tiempo para saber que hay gente que me importa... Porque sin importar el quien, el cuándo o el dónde, sé que ahora tengo muchas cosas que “valen” que tienen un valor... y para mi, siendo mi historia, este tiempo presente tiene mucho de valioso.

martes

Querida Maldita Muerte:

Mañana cuando anochezca todo será distinto para nosotros. Será posiblemente la última vez que podamos estar juntos, y no seremos capaces de aprovechar el último instante que compartamos porque la muerte vendrá a interrumpirnos. Maldita seas, maldita seas, maldito sea tu amor que un día me ofreciste disfrazado de juventud y alegría; ese mismo amor que tantas veces me ha hecho llorar, ese amor que me está haciendo tanto daño. ¿Por qué tendrá que ser todo tan difícil? Nunca llegaré a rozar lo que tú me ofreciste esa noche. Maldita sea tu sonrisa, tu lágrima, tu mirada. Maldita seas tú, muerte despreciable que acechas en cada esquina, que vienes sin avisar, que entras sin llamar y arrasas a tu paso dejando tras de ti destrozadas todas nuestras vidas. Maldita seas vida, que ofreces tu rayo de luz cuando vamos a morir, todo por su culpa, maldita muerte que nos buscas a nosotros y a los nuestros.
Seca lágrima derramaré la próxima vez que te sienta cerca y ten por seguro que te estaré esperando pacientemente hasta el día que vengas a por mí, y hasta el día que tú y yo juguemos esa maldita partida con ganador seguro. Moriré, moriré en tus manos, pero gracias a ti podré disfrutar de lo que se siente al llorar, de lo que es el dolor, el miedo, la tristeza. Descubrirte será mi mayor deseo, por que ese es sin lugar a dudas mi destino pero no podré salirme con la mía y olvidarte, alejarte de mi vida, echarte, aislarte de mi mundo y convencerte de que aquí no pintas nada, solamente dolor y miedo.
No te temo, lo sabes, es más deseo enfrentarme a ti y por fin, de ese modo, saber que ya no sufriré más, saber que así, gracias a ti, podré descansar y no continuar pasando miedo y en peligro, aguantándote cada vez que buscas, cada vez que encuentras, cada vez que matas. Y ahora estoy celosa, de verte aparecer y ver que yo sigo aquí y no poder acompañarte.
Me mintieron sobre ti, me mentiste, me engañaste haciéndome sentir bien por seguir entre ellos, pero no me desvelaste el auténtico placer de tu compañía. Me ocultaste el verdadero goce de la vida, la muerte. Quizás te ofrezcan mil manjares por no tenerte en sus brazos, mil delicias por tu tardanza. Yo desde aquí te ofrezco mi vida, mi vida... y porqué no también mi muerte, al fin y al cabo, arrasarás con todo lo que soy, he sido y seré. Todo porque para tener que acompañar a éstos vivos en su iseria prefiero compartir el resto del camino con los que descansan y no padecen, porque ellos disfrutarán junto a mi. Con mi muerte disfrutaremos de sus vidas.

domingo

Dreaming...

Hasta donde la vista alcanza se extiende
de tinieblas cubre los campos
de tinieblas invade los corazones
de tinieblas las sonrisas torna
de tinieblas las calles deja
de soledad la tierra, el agua y el aire
pinceladas grises desbordan los mares
techo bajo techumbre desgarrada
fuertes sacudidas de látigos incandescentes
inconmensurables ráfagas incandescentes
voluptuosas bañadas ventoleras.

Que la tormenta no apague tu dulce sonrisa
que el otoño esta vez venga con prisa
que la maleza no oculte tu pluma
que tu espiritu se mantenga en la luna.


No dejes de soñarte
(No dejo de soñarme)



Cosas

Si todas las cosas frías fueran húmedas
y todas las cosas húmedas fueran frías...
y si todas las cosas duras pincharan nuestra piel
y ninguna otra cosa lo lograra...
¿Diferenciariamos entonces entre frialdad y humedad
y dureza y pinchazo respectivamente?

No excuses

Lo más leído